Perdona, Antístenes,
pero me ha dicho el perro
que ahora vives en un
edificio
circundado de ventanas
y sin flor alguna.
Tus besos las
marchitaban...
con su veneno.
Pedro Vera Sánchez, Trinidad.
Su veneno era la verdad del que nada tiene y nada quiere, una especie de vade retro para la consumista sociedad que nos asfixia, que asfixia las flores mas bellas, amor, libertad, independencia. Y le llamaban cinico, los platones de hoy le habrian despreciado por marginal.
ResponderEliminarEfectivamente pero, en este caso, lo he tomado como referencia para retratar otra figura, la de quien nada es y nada tiene y se enaltece en público.
EliminarPura sátira.
Gracias Pedro Alejandro.
Osease, cualquier politico profesional al uso. Un saludo tocayo.
EliminarPodría serlo pero se trata de un profesor de filosofía de los que se autodenomina POETA. Sí, con mayúsculas.
EliminarBajo mi punto de vista las menciones y reconocimientos habrán, en todo caso, de darlas los lectores. Supongo.