sábado, 17 de noviembre de 2012
Regalo de Mariángeles Ibernón Valero
Lágrimas de Vértigo
Nunca me agradó llorar
ni pensar en el pasado.
Me he resistido a sentir
unas suaves caricias
entrelazando mis manos.
No he querido soñar
con el tacto de tu aroma
danzando por mis costados.
Yo quise ser mariposa
que, volando alta y libre
por caminos ya pasados,
a tu encuentro y con dulzura
el destino me ha llevado.
¿Y del ayer qué me queda
al producirse el milagro?
¡¡Que tu cuerpo sea mi espíritu,
y el calor tan deseado
llene de vigor mis venas
que mi sangre está llorando!!
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Cierra los ojos
ResponderEliminarSiente el dolor
De la ausencia
Pero disfruta a la vez
El que contaste
Hasta diez
Antes de vender
Libertad para volar
Por palabras para soñar.
Gracias por tu visita Pedro.
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