Al llegar al ocaso de este revuelto abril, me dispongo a hacer balance y, ¡oh, sorpresa! me encuentro exhausto.
Diversas batallas libradas, heridas múltiples de versos esparcidas en cada rindón del alma y todo como resultado de este calendario geográfico detallado:
- del 2 al 5 : Madrid. Dinosaurio y Libertad8, museos incluidos.
- 12, Moratalla: Café con versos.
- 19, Xàtiva: Pintura al carrer.
- 21, Valencia: En Chez Lyon con Salvador Pliego y Dolors Alberola.
- 22, Cieza: Presentación de Ingenios de Murcia.
- 23, Maratón poético en Murcia, con Cristián Minguez.
- 28, Comida poética en La Charca (Totana)
- 29, Los lunes bohemios de La Clásica.
Muchas batallas en diversos campos, un impresionante botín de hermosas imágenes para el alma, muchos espacios para reponer fuerzas juto a la tropa...
Mucho ajetreo en esta lucha en pro de la difusión de la cultura, muchas batallas, repito.
Pero insatisfecho.
Aún me queda "ganar la guerra" y en ello estoy.
Por suerte la tropa, mi tropa, está perfectamente adiestrada y responde siempre presurosa a cualquier alerta desde su trinchera de palabras.
Gracias poetas, gracias amigos, gracias a todos por estar ahí, sienpre atentos, siempre dispuestos.
Si continuamos con este empeño, tal vez no ganemos la guerra pero tengo seguro que ganaremos todas y cada una de las batallas que nos quedan por librar.
Por cierto, las dos próximas, viernes 3 y sábado 4 de mayo, en tierras almerienses: Faro Mesa Roldán, en Carboneras y Antas.
Gracias a ti siempre querido poeta.. que sigues en la brecha incansable ..
ResponderEliminarUn enorme y cálido abrazo
Sin vosotros, querida Aris, nada sería posible.
EliminarOtro abrazo para ti.
Gracias a tí por hacer que la poesia siga viva
ResponderEliminarun gran abrazo
Un abrazo Elena por estar al otro lado haciendo realidad lo que dices: que la poesía continúe viva.
EliminarAunque esté en silencio siempre estoy al otro lado
ResponderEliminardeleitándome con tus versos.
Gracias Elena. Tengo conocimiento de tus visitas, cosa que es de agradecer.
EliminarRespondamos juntos y, si se dieran en algún momento las condiciones idóneas, ¿quién dice que no será la palabra la que gane la guerra final?
Lo importante, creo, es perseverar en el intento.
Abrazos.
Con la sutileza
ResponderEliminarde un verso
se ganan
más batallas
que con millones
de armas..
Tú eres verso, Elena.
EliminarTú, como yo y como tántos amigos, somos el arma de la palabra.
Pues... ¡a emplearla!
Abrazos nuevos.
Abrazoooooooooos
EliminarPues que sean "abrazos chillaos" que decimos en mi tierra, querida Elena.
EliminarEs una actividad gratificante y hermosa.
ResponderEliminarUn abrazo, Pedro.
Si, Mcarmen Fabre, tan gratificante y hermosa como ardua.
EliminarPero aquí estamos, trabajando sin desmayo en busca del fin, de la meta marcada.
Abrazos.
La poesía fue un arma cargada de futuro y se equivocó, como la paloma albertiana, el verso celayiano. La poesía es un arma cargada de presente. Aunque la épica prosaica de la vida impuesta eclipse la lírica. la guerra se gana cada día porque, como dice Cervantes, "con ser vencidos, llevan la victoria":los poetas viven, ave fénix, sobre sus propias ruinas, que siempre son más reales que los falsos castillos de la especulación financiera.
ResponderEliminarUn saludo aguileño desde el exilio.
Llevas toda la razón, somos ave fenix y luchamos contra esos castillos que, aunque no lo parezcan y se muestren majestuosos, son de arena.
EliminarOtro saludo para un exiliado y, puestos en verso, parece que nos remontamos en la historia pasada en la que, por sus palabras, muchos hubieron de exiliarse, renegar de sus creencias y convicciones o... morir.
Saludos aguileños.