Te he visto dormida
y he sentido celos
al acariciarte la brisa.
Te he visto moverte
y he sentido celos
del aire que te envolvía.
Te he visto marchar
y he sentido celos
del adiós.
Habría preferido hasta mañana.
O mejor, hasta luego.
Pedro Vera Sánchez, Trinidad.
Ya de niño, escuché este cantar:
ResponderEliminarLos celos son alfileres
que no me dejan vivir.
Quien quiera saber de celos,
que me lo pregunte a mí.
.........
Me gusta el poema.
Gracias José María.
EliminarEfectivamente, los celos son alfileres pero que punzan el alma y este trabajo se lo dediqué precisamente a una persona celosa.
Un abrazo.
Me lo llevo... con permiso.
ResponderEliminarAmiga Magda, tienes autorización para llevarte todo aquello que te guste. Así es como mi trabajo cobra vida, cuando otro lo hace suyo.
EliminarPor lo tanto las gracias es una palabra que me corresponde a mi.
Un abrazo Magda.
Y lo que duelen...
ResponderEliminarPrecioso, Pedro.
Un beso.
Otro beso para ti Indra.
EliminarGracias por tu visita.
Felicidades Pedro...un abrazooo!!
ResponderEliminarMariola Baldan
Gracias Mariola.
EliminarUn besico.
Me gustan tus poemas Pedro.. sencillos .. delicados...blancos..me hacen sentir bien...un abrazo..
ResponderEliminarGracias Josephine.
EliminarMisión cumplida ya que la finalidad de quienes escribimos no es otra que encontrar un lector complacido.
En este caso una lectora amiga.
Un abrao.
¡Los celos!, la enfermedad de los insegur@s, de las personas con baja autoestima, con sentimiento de inferioridad. Lástima de quienes los padecen y de quienes los aguantan. Un saludo
ResponderEliminarPues si, lástima de quienes lo padecen.
EliminarUn abrazo murciano Conchi.