lunes, 21 de enero de 2013

Como iris errante...



Regalo/composición de la amiga Manoli Merino.

























Como iris errante,

                   sin destino, sin fe,

he cruzado esta vida

buscando el eco de tu sonrisa,

con la ceguedad única

de hallarla en los labios de un niño,

en el canto de un ave prisionera,

en el ritmo del aire...

hasta que mecido por un baile de luces,

elevado sobre mil ramos de amapolas,

noté cómo la fuerza de un toro hostil

me arrastró en el camino

                   (ciego y sin retorno)

del destino

a la brevedad inapelable

de tu presencia.



El velo de la noche

no me impidió ver

la transparencia de tu alma.

Pedro Vera Sánchez, Trinidad.

6 comentarios:

  1. Qué bellas palabras ... rodeadas de una ternura intensa ..

    Sonoros y dulces besos

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  2. Si en los caminos ciegos y sin retorno, se puede ver esa transparencia, aún todo es posible.
    Hermoso. Un abrazo.

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  3. El velo de la noche no te impidió ver su transparencia,es que es un alma especial. Precioas metáforas.un gran abrazo

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    Respuestas
    1. Gracias Teresa.
      El amor suele vivir en la noche más que en el día cuando se encuentra lejos y las reminiscencias permanecen a pesar de todo.
      Un abrazo.

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